Ligero goteo nuclear de 4.000 litros diarios

Encontrado en levante-emv.com:

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha detectado una fuga de agua refrigerante en la central nuclear de Cofrentes que alcanza los 4.000 litros al día, según consta en el acta de inspección del organismo estatal expedida el pasado 11 de marzo. La fuga no sale al exterior de la central, sino que discurre por una canalización interna hasta desembocar en el pozo seco de la instalación, una zona situada debajo de la vasija del reactor de Cofrentes. La fuga procede de tres accionadores de las barras de control del reactor: en dos accionadores hay un "ligero goteo", y en el tercero se ha detectado un "goteo continuo". El informe oficial asegura que "los distintos análisis isotópicos realizados muestran que se trata de agua de reactor muy diluida". Es decir: poca radiactividad diluida en un volumen de agua muy grande.
La plataforma Tanquem Cofrents denunció ayer la "gravedad del problema" y exigió que, puesto que "hay que aprender la lección que el accidente de Fukushima ha dado", es perentorio "el cierre inmediato y definitivo de la central de Cofrentes". Por su parte, el portavoz de la central nuclear, Jesús Cruz, negó que se trate de una "fuga" (aunque el consejo nuclear la califique con esa misma palabra en su acta) y recalcó que esas "aportaciones a sumideros" están "contempladas y perfectamente establecidas según el diseño" de la central, a pesar de que el acta de inspección la destaca bajo el epígrafe "evolución de sucesos e incidencias no rutinarias".
Las dos partes mantienen posturas contrapuestas. La central de Cofrentes entiende que se trata de una confusión "terminológica" y recalca que "no hay ninguna preocupación ni nada para alarmarse, sino la mala interpretación de forma malintencionada que hacen algunos aprovechando la situación de Fukushima". Su portavoz insiste en que esa recogida de agua procedente en su mayor parte de la condensación de equipos de aire acondicionado "ni es nueva ni muestra niveles que no estén establecidos". "No ha cambiado nada en los últimos meses ni esto es nada anormal", precisa. "El sumidero está para eso: para la recogida de aportaciones y su canalización, procesado, tratamiento y vuelta al ciclo. Y en cantidades que pueden ser mucho mayores", aunque no detalló el nivel máximo permitido.
A juicio de Tanquem Cofrents, este argumento no se sostiene. Su portavoz, Carlos Arribas, afirmó a este diario que "si esto fuera un funcionamiento normal, no lo destacarían los inspectores del Consejo de Seguridad Nuclear en un acta de inspección". Además, Arribas subraya que "las fugas en diversos accionadores hidráulicos de las barras de control de la central de Cofrentes", detectado por el CSN, tendrá una consecuencia en el futuro: "Es una contaminación radiactiva del pozo seco y, en la próxima recarga, los trabajadores que entren al pozo seco cogerán una radiactividad mayor que en la mayoría de centrales", asegura Arribas.

Fugas en los accionadores
Según Tanquem Cofrents, "aunque el CSN minusvalora la importancia de esas fugas, evaluadas en 4.000 litros por día al final del año 2010, debido a la dilución, baja actividad radiactiva y tendencia estabilizada, en nuestra opinión ese hecho tiene una gran importancia, pues viene a demostrar que el proceso de corrosión sigue adelante" tras la sustitución en 2005 y 2007 de "todas las tuberías de los accionadores de las barras de control" de la central de Cofrentes. "La actual constatación por el CSN de la existencia de nuevas fugas demuestra, o bien que esas soldaduras no fueron efectuadas correctamente o que el proceso de corrosión intergranular continúa deteriorando la integridad de la vasija del reactor", añaden.

Grieta en Fukushima que vierte radiactividad al mar

Encontrado en El País:

Los técnicos de Tepco siguen trabajando sin descanso en Fukushima para evitar que se agrave aún más la situación que vive la central pero la solución parece quedar aún muy lejos. La operadora de la planta nuclear ha localizado una grieta en el reactor número 2 por donde se está filtrando agua altamente radiactiva al mar. El nivel de radiactividad del pozo de filtración es de 1.000 milisieverts por hora, una cantidad suficiente como para incrementar las posibilidades de contraer cáncer a largo plazo en el caso de una exposición prolongada. Como primera medida de contención, TEPCO ha anunciado que procederá inmediatamente a rellenar la fisura con cemento para detener el vertido.

Expertos de la compañía nuclear francesa Areva, suministrador de combustible nuclear a Fukushima, están ayudando a los técnicos japoneses a encontrar una solución para deshacerse del agua contaminada, que ha llegado al mar, y que también se ha filtrado también al subsuelo casi 15 metros bajo uno de los seis reactores que tiene la central. Tepco, que ha sido muy criticada por su falta de transparencia y repetidos errores en la gestión del desastre, dijo que daba la bienvenida a la ayuda extranjera. La operadora aseguró que esperan utilizar en los próximos días un robot dirigido por control remoto enviado por EE UU para evaluar la situación en áreas con gran radiación. También afirmó que ha sido creado un panel de expertos nucleares japoneses y estadounidenses y militares estadounidenses para afrontar la crisis.

Por lo visto eso quiere decir que si lo de Chernóbil (Ucrania), en 1986, fue considerado accidente nuclear de nivel 7. Y eso hasta ahora era lo más alto que había, podría haber quedado superado y resultar un accidente de nivel 8. Pero ya nos lo dirán dentro de unos años que se aclare todo.